Me llamo Nina Pérez y estoy aquí hoy en nombre de MomsRising.org / MamásConPoder.org y de nuestro más de un millón de miembros para expresar que tenemos el corazón roto porque una madre más ha tenido que sepultar a un hijo demasiado pronto. Ninguna madre debería tener que enfrentarse a esta tragedia o debería tener que vivir con el temor de que su hijo sea lastimado por quienes están encargados de protegerlo.
Cada vez más estadounidenses están dándose cuenta de las formas en las que la policía utiliza perfiles raciales, ataca o incluso mata a hombres y mujeres de raza negra a una tasa significativamente mayor que a los de raza blanca y están exigiendo necesarios cambios.
De hecho, los estudios revelan que la policía detiene, multa, arresta y encarcela a los afroamericanos y latinos en tasas desproporcionadas—y que las mujeres negras tienen de tres a cuatro veces más posibilidades de ser blanco de la policía y ser encarceladas que las mujeres blancas. Esto afecta nuestra economía y a nuestras familias. En un artículo publicado recientemente, Kellie King-Jackson, bloguera de MomsRising / MamásConPoder, se disculpó con su hija por haber ignorado su temor a la policía. Kellie y su esposo creían que su joven hijo afroamericano tenía más posibilidades de ser discriminado que su hija, pero la historia de Sandra Bland hizo que se dieran cuenta de la cruda realidad, sus dos hijos estaban en peligro. “Perdóname por haber pensado que estabas segura porque eres una 'niña buena', prestas atención y dices “sí, señor/señora”, escribió Kellie. “Perdóname porque la labor que he estado haciendo durante toda mi vida no ha producido cambios sistémicos que garanticen tu seguridad en nuestras calles o en el sistema judicial. Perdóname por prestar más atención al riesgo que asumimos enfrentaba tu hermano, lo que te ha dejado vulnerable… No estás segura. Debes estar alerta en todo momento. Mereces mucho más pero no puedo prometértelo.”
Ninguna madre debería tener que hacer este tipo de advertencia a su hija. Ninguna madre debería tener que ver o escuchar una grabación de un oficial de policía gritándole a su hija “¡Te voy a electrocutar!”, como lo hizo la mamá de Sandra Bland. Ninguna madre debería tener que escuchar el sonido de la cabeza de su hija siendo estrellada contra el suelo por el oficial que la arrestó. Ninguna madre, y nadie, debería tener que perder a un ser querido. Es sencillamente inaceptable.
Apoyamos a la familia de Sandra Bland y consideramos su trágica muerte como otro caso más del uso de perfiles raciales con resultados letales. MomsRising y nuestros miembros de todo el país nos unimos para pedir que el Presidente Obama y la Fiscal General Loretta Lynch se valgan de todo el poder del Departamento de Justicia para investigar y procesar a quienes desempeñaron un papel en el arresto y muerte de Sandra Bland—y tomen las medidas necesarias para poner fin al uso de perfiles raciales y a la brutalidad policial. Juntos somos una poderosa fuerza que puede construir un mejor Estados Unidos para todos nosotros. ¡Gracias!
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