Caminando entre un mar de personas hacia el salón, sentí que una muy esperada meta se estaba materializando. El hecho de que en nueve meses iba a poder votar estaba dando vueltas en mi cabeza. Era el mes de febrero de 2012. Había vivido en este país desde 1979 cuando vine de Colombia a los siete años. A mis 40 años finalmente me estaba convirtiendo en ciudadana de Estados Unidos y, en ese momento, como madre, profesional de la salud mental y como educadora de padres, comprendí que finalmente me iban a dar el derecho, el privilegio y la responsabilidad de votar. Nunca he tomado a la ligera este regalo.

Mis hijos y mis clientes necesitan que vote a consciencia para elegir a líderes que satisfagan sus necesidades y apoyen a sus comunidades. Para los padres de familia y proveedores de cuidados, votar es una responsabilidad. Muchos padres de familia se sientan frente a mí preocupados, ansiosos y angustiados por el bienestar de sus hijos. Se preguntan si las decisiones que toman sobre la educación, disciplina y salud emocional de sus hijos los beneficiará en el futuro. Pero muy pocas veces se preguntan cómo las reglas y sistemas principales de la sociedad tendrán o no un efecto negativo en el desarrollo, salud mental y el futuro éxito de sus hijos. Pero los hago pensar en esto. Son temas de los que hablo a menudo.

Nuestro éxito como padres, desde el nacimiento del niño hasta que sale del hogar para ir a la universidad, está íntimamente relacionado con nuestros líderes electos a nivel local, estatal y federal. Votar puede asegurar que los responsables de promulgar las leyes y de asignar fondos a importantes programas que ayuden a las familias tomen decisiones que sean acordes con los valores, metas y necesidades de los padres para sus hijos y sus familias.

Estas decisiones de nuestros líderes electos son muy importantes porque en los primeros mil días de la vida de un niño se desarrollan patrones de por vida que afectarán su experiencia como ciudadanos.[1] Los primeros mil días se cuentan desde el embarazo hasta el segundo año de vida del niño.

Durante este corto periodo de tiempo se crean patrones en el cerebro y el cuerpo que pueden permanecer con el niño toda su vida. El acceso a atención médica pre y posnatal, seguro de salud, nutrición, atención infantil de alta calidad y educación es responsabilidad tanto de los padres como de nuestra legislatura. Si los padres renuncian a su derecho y responsabilidad de votar, los legisladores que son
escogidos siguen teniendo el poder de tomar decisiones sobre las necesidades básicas de sus familias e hijos. En el estado de Florida, los preescolares voluntarios para niños de 4 años estaban a 75% de su capacidad a finales del 2017.

Este es un porcentaje muy alto en comparación con otros estados, pero los fondos asignados por estudiante están entre los más bajos de la nación porque los legisladores han estado reduciendo sus fondos en el presupuesto del estado cada año desde el 2010. [2] Cuando no financiamos las necesidades de nuestros hijos estamos dejando de invertir en nuestro futuro.

En noviembre del 2012, entré orgullosamente a mi cabina de votación y llené mi papeleta, algo que he hecho en todas las elecciones desde ese año. Sé que al entrar en esa cabina de votación estoy usando mi voz, mis valores y mi educación para escoger a líderes locales, estatales y federales que ayuden a mis hijos, a mis clientes y a mi comunidad.

Cuando uno de nosotros sufre, todos sufrimos. Cuando uno de nosotros es exitoso, todos somos exitosos. Estamos interconectados de muchas formas como miembros de la misma comunidad. La justicia y el cambio social están en nuestros hogares porque son uno de los pilares del desarrollo de nuestros hijos. Debemos votar para asegurar que nuestros hijos pertenezcan a una sociedad que los apoye, aprecie y respete tanto como lo hacemos nosotros. Votar es uno de los muchos deberes que tienen los padres. En mi lista de cosas por hacer, está cerca del primer lugar. Espero que ustedes también acepten su responsabilidad y ejerzan su derecho.

Visiten dos.myflorida.com/elections para encontrar el horario y los lugares de votación y los tipos de identificación que deben tener para votar.

Publicado originalmente en Stop Parenting Alone